Redacción | San Fernando.- La alcaldesa, Patricia Cavada, ha visitado este lunes la zona del cementerio municipal donde se están llevando a cabo los trabajos arqueológicos para la detección de restos de las personas represaliadas por la represión franquista, en concreto en la fosa común y en la zona conocida como civil, donde desde noviembre la Asociación por la Recuperación de la Memoria Democrática está llevando a cabo la primera fase del proyecto de exhumación en cumplimiento de la Ley de Memoria Histórica de 2007.
La primera edil realiza esta visita después de que la citada asociación haya dado a conocer públicamente el hallazgo de los primeros cuerpos que revelan una disposición y un tratamiento no respetuoso hacia esas personas a la hora de proceder a su enterramiento, circunstancia confirmada por el antropólogo forense Juan Manuel Gijo Mauri, uno de los componentes del equipo técnico que desde el mes de noviembre está llevando a cabo esta intervención.
La alcaldesa ha conocido el desarrollo de las excavaciones a través del arqueólogo director de los trabajos, Jorge Juan Cepillo Galvín, que ha informado a Cavada que, tras las resultados negativos de las primeras prospecciones en el cementerio civil, las excavaciones en la denominada ‘zona caliente’ que corresponde al subsuelo de la fosa común habilitada en el camposanto ya han dado los primeros resultados positivos, encontrándose hasta el momento cuatro cuerpos. También se han hallado casquillos de bala y restos de posible uso de cal viva sobre éstos. “Resulta aventurado determinar el número exacto de personas que puedan estar enterradas”, especificó a los medios de prensa el director de los trabajos, “si bien los estudios realizados por Miguel Ángel López Moreno, coordinador del estudio histórico de localización -que se encontraba presente en la visita de hoy- indican que podemos estar hablando de unos doscientos represaliados”, indicó Cepillo, apostillando que el hallazgo dado a conocer “es la punta del iceberg de lo que pueda existir a más distancia de la superficie, cuya cota actual con respecto a la fosa la situamos a dos metros de profundidad”.
En este sentido, el director de los sondeos arqueológicos especificó que los trabajos hasta ahora previstos “se han cumplido satisfactoriamente”, ya que se trata exclusivamente de una primera fase de detección de los restos, sin que en esta intervención se contemple la exhumación. “Ahora es la Asociación por la Recuperación de la Memoria Democrática la que tiene que dar el paso para continuar con el proyecto que haga realidad la recuperación de los restos, alentando a ello a la Dirección General de la Memoria Democrática -dependiente de la Junta de Andalucía- a que siga adelante para acometer y asumir la fase definitiva; hay mucho trabajo por hacer” apostilló, aconsejando que se proceda a la exhumación antes de las fechas estivales para llevarlo a cabo en condiciones meteorológicas favorables que permitan llevar a cabo los trabajos sin afectar a los restos óseos que puedan sufrir los efectos de la tierra y el barro.
La concejalía que coordina el edil ha corrido a cargo con los trabajos de preparación de terrenos, eliminación de elementos adosados con posterioridad en esta zona del camposanto isleño como un muro que dificultaba las prospecciones, limpieza y materiales empleados por el equipo y la veintena de voluntarios y voluntarias que han desempeñado la labor de excavación en estas semanas desde que en noviembre se iniciaron los trabajos.
Cavada, quiso agradecer a los profesionales el trabajo desempeñado en esta primera fase y la labor del voluntariado.
Cavada ha explicado que termina “una primera fase de comprobación fehaciente de que estamos ante una fosa común con personas represaliadas. Ahora corresponde poner en marcha el proyecto de exhumación, iniciar la tramitación administrativa y el gobierno municipal va a poner todo el empeño en ello a la hora de colaborar con la Junta y Diputación en la culminación de este trabajo”.
